- Tras la puerta de lo que parece ser un local normal y corriente, en los bajos de una finca, se encuentra el recinto deportivo más antiguo de España: el trinquet de Pelayo.
- Su cierre definitivo estuvo muy cerca en 2015 pero, por suerte, y gracias a una gran inversión y reforma en 2017, bajo el nombre de Pelayo Gastro Trinquet, son muchos los que todavía hoy disfrutan de uno de nuestros deportes más autóctonos en el lugar con más historia deportiva de Valencia.
NOTA DE PRENSA ACTUALIZADA DEL SÁBADO 7 DE OCTUBRE DE 2017:
Pelayo reabrió sus puertas el pasado sábado 7 de octubre de 2017 con un nuevo proyecto deportivo, gastronómico y cultural para revitalizar la pilota valenciana
- Pretende promocionar la pilota valenciana entre el público más joven, la sociedad valenciana y los turistas e involucrar a las administraciones públicas para asegurar su futuro.
- El Trinquet tendrá un intenso programa deportivo y estrena gastrobar de la mano del chef especialista en cocina valenciana Pablo Margós y cuenta con una zona de exposición del Museu de la Pilota El Genovés para poner en valor indumentaria y artículos inéditos de reconocidos jugadores.
El trinquet de Pelayo reabrió sus puertas el pasado sábado, día 7 de octubre, con un nuevo proyecto deportivo, gastronómico y cultural para revitalizar la pilota valenciana.
Con más de 150 años de historia, el objetivo es recuperar “La Catedral de la Escala i Corda” como espacio emblemático del Cap i Casal e incrementar el conocimiento y la afición por la pilota valenciana. Este sábado se volverá a escuchar el ‘Cavallers, va de bo’ y comenzará una partida primordial para promocionar este deporte que forma parte de la identidad y la cultura de los valencianos, entre el público más joven, sociedad valenciana y turistas, e involucrar a las administraciones públicas para asegurar el futuro de la pilota.
El histórico trinquet, considerado el recinto deportivo cubierto en activo más antiguo de Europa, se ha sometido a algunas remodelaciones en los últimos meses.
A nivel deportivo, se han producido mejoras en el terreno de juego para un mayor disfrute de la afición y de los jugadores. La Catedral de la Escala i Corda luce nueva imagen tras cambiarse el piso de la cancha y el terrazo de la escala, además de modificar la llotgeta de autoridades y contar con un nuevo videomarcador de última generación. También se ha adecuado una rampa para minusválidos y se ha realizado una reforma integral de los servicios
El trinquet de Pelayo intensificará el programa deportivo con numerosas competiciones que congregarán a la mejor representación de la pilota valenciana y que tratará de ganar adeptos a este deporte.
Así mismo, continuará con sus jornadas de puertas abiertas para que todos los colegios de la Comunitat Valenciana puedan conocer sus instalaciones y su historia. Creará, además, una escuela de pilota para niños y mayores.
Otra de las grandes novedades de La Catedral es la apertura de un restaurante tras remodelar el antiguo bar del emblemático recinto.
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Bajo el nombre de “Pelayo Gastro-Trinquet” y liderado por el chef Pablo Margós, se ofrecerá auténtica gastronomía valenciana en la que se fusionará la tradición culinaria con protagonismo de productos autóctonos de calidad y la cultura del deporte autóctono valenciano. Todo ello bajo una imagen renovada del local en la que los visitantes se adentran en el mundo de la pilota y su cultura.
Entre otras actuaciones, el Trinquet de Pelayo contará también en su entrada con una zona de exposición itinerante del Museu de la Pilota El Genovés que mostrará indumentaria y artículos inéditos del mundo de la pilota valenciana.
Pelayo Gastro-Trinquet, lo mejor de la gastronomía valenciana de autor
Con capacidad para 80 comensales, Pelayo Gastro-Trinquet aspira en convertirse en un referente gastronómico en la ciudad, tanto para los valencianos como para los turistas.
“Nuestro reto es dar una oferta gastronómica propia y de autor a un precio sostenible con clásicos como la Tonyina, el abadejo o la Titaina con un formato joven y actual” ha destacado Pablo Margós, el hasta ahora chef de Las Bairetes en Chiva.
La carta contará con tapas, bocadillos, y en ella tendrán mucho protagonismo el producto autóctono, las brasas y los arroces.
Además, en el restaurante destacará un grandioso monumento fallero del artista Manolo García realizado para la ocasión. Una espectacular mano de pilotari, realizada con la técnica tradicional de vareta de más de 3 metros de ancho por 3 metros de alto y ubicada en el techo, sorprenderá a todos los asistentes.
El diseño del local, a cargo del reconocido interiorista Carlos Serra que también capitanea el espacio de decoración Mercader de Indias, realiza numerosos guiños a la pilota valenciana y en él destacan sus altos techos, las vigas de madera originales y el ladrillo de caravista histórico, entre otras particularidades. Para la remodelación del local se ha contado exclusivamente con material y mobiliario procedente de la Comunitat Valenciana con reconocidas firmas como Porcelanosa, Andreu World, Capdell o Misana, entre otras. Una decoración que ha tratado de mantener la cultura y los valores valencianos a través de elementos decorativos sin perder el origen y el sentimiento deportivo que envuelve al trinquet.
SU HISTORIA:
20 de agosto de 1868. Por aquellos días, la prensa nacional, y provincial, se hacía eco de multitud de noticias ocurridas en Valencia. Noticias como la proposición de Dióscoro Puebla a la Diputación provincial de Valencia, proponiéndole adquirir “El Compromiso de Caspe”, un óleo sobre lienzo que fue Medalla de Primera Clase en la Exposición Nacional de (1867) y que actualmente se encuentra expuesto en el Congreso de los Diputados donde aparece San Vicente Ferrer; la escasez de pescado que por entonces sufría Valencia en la temporada estival con altos precios para, por ejemplo, la merluza; la sequía que sufría Valencia con pérdidas de prácticamente la gran mayoría de cultivos de las inmediaciones de la huerta, a pesar de la ayuda recibida, tarde, a través del agua por las acequias tras las reiteradas peticiones de auxilio; o el revuelo, y censura, que muchos periódicos valencianos sufrían, como le ocurrió a Teodoro Llorente en más de una ocasión en el diario de Las Provincias, en un año “duro”, dado los hechos que estaban aconteciendo y que vaticinaban un periodo difícil (se avecinaba la llamada “Revolución de 1868”, también conocida por La Gloriosa o La Septembrina).
Pero si alguna noticia seguramente nos llamaría la atención si tomáramos un periódico de aquellas fechas, sería la inauguración del que hoy en día es considerado el recinto deportivo más antiguo de España. Recinto necesario por las necesidades de época y que seguramente valorarían mucho más en aquellos tiempos si nuestros antepasados y ciudadanos de aquella Valencia antigua supieran la importancia que tiene hoy en día la Catedral de la Pilota, hoy por cierto infravalorada y despreciada por muchos (una auténtica pena).
Del día anterior a su inauguración, siendo ésta un 20 de agosto de 1868, se hacía eco Las Provincias en su artículo sobre la partida benéfica que iba a tener lugar en favor de los pobres párvulos de la Asociación de Nuestra Señora de los Desamparados para inaugurar el trinquet, y que por cierto, días después certificaba como éxito en su artículo del día 22 de agosto de 1868:

La pilota valenciana, a lo largo de su historia, se juega en nuestras tierras desde antes de la Conquista cristiana de Jaume I, siendo incluso un juego “Real” por parte de la Corona de Aragón, donde cabe destacar el famoso bando de 14 de junio de 1391, cuando el Consell General de la Ciutat de Valéncia prohibió el juego:
«. . . Car per occasió del joch deius escrit se seguien diverses blasfemies en offensa de nostre senyor Deu e dels sants e diverses inyuries de paraula e fet a les gents anants e stants per los carrers e places de la Ciutat ha novellament establit e vedat que alcuna persona privada o estranya de qualsevol estament condició o ley sia de edat de X anys a ensus no gos ne presumesca jugar dyns los murs de la dita Ciutat a joch de pilota arruladiça sots pena de XX morabatins dor per cascuna vegada que contrafara. E se sera algu que la dita pena pagar no puxa sera mes en presó e correra la Ciutat ab açot sens tota gracia e remey . . .»
Por este recinto han pasado glorias de la Pilota Valenciana, como las que hoy están expuestas en la Galería de Honor del mismo trinquet y que podéis ver en la foto siguiente de Ana Alas (Flickr), además de decenas de propietarios que han gestionado el recinto que ha ido de mano en mano privada peligrando su cierre definitivo por jubilación en 2015.

Propietarios como su fundador, el Senyor Benet; un tal Rata en los inicios del siglo XX; Quico el Tramusser d’Alboraia en los años 20; Alfredo Mataix y el expilotari Niño de Simat; un grupo de pelotaris encabezados por el Faixero de Gandía (José Peiró Sanchis) durante la Guerra Civil; Manuel Segarra Tur y Idelfonso Martinez, de la Vall d’Uixó, desde 1947; o Arturo Tuzón, también de la Vall d´Uixó, desde 1976 hasta 2015, año que pudo ser el final de este lugar emblemático.
Por suerte, fue el empeño de un empresario el que salvó el trinquet Pelayo de Valencia, con la idea y objetivo de fuera en unos años público y gestionado por Generalitat, la Diputación, el Ayuntamiento de Valencia y por la Federació de Pilota Valenciana.
Las negociaciones fueron muy duras y se llegó a temer por su cierre definitivo de no ser por su actual propietario José Luis López, animado por administraciones, que lo adquirió finalmente en septiembre de 2015 por un alquiler mensual de unos 3.400 euros y una indemnización de 112.500 euros a Arturo Tuzón.
Gracias a una fuerte inversión para reformarlo (inaugurado en el último tercio de 2017), Pelayo Gastro Trinquet, su actual nombre, goza de una buena salud.
Pero a pesar de esta gran noticia, para muchos valencianos sigue siendo un desconocido que no sabe su ubicación. ¿El motivo además del desconocimiento? Bueno, la verdad es que no está situado a simple vista, ya que se esconde en una de las calles aledañas a la Estación del Norte, en Calle Pelayo, donde se indica su situación con rótulos pero al ver las fincas, uno se preguntará “vale ¿y dónde está el trinquet?”.
Pues su acceso es a través de una pequeña puerta trasera del local, el Gastro Trinquet, el cual nos invita a entrar y descubrir uno de los mayores tesoros deportivos que hemos estado a punto de perder. Y es que resulta curioso que, en una calle más de las que se pueden recorrer en Valencia, y entre fincas oculto a la vista de cualquiera, uno pueda encontrarse con ese recinto deportivo, la llamada catedral de la pilota valenciana, escondido para aquellos que desean disfrutar de este lugar con más de 150 años de historia.

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