- La Comunitat Valenciana se convierte en pionera en la protección de los animales de compañía y se marca como objetivo el sacrificio cero.
El Pleno del Consell ha aprobado el proyecto de Ley de Protección, Bienestar y Tenencia Responsable de los Animales de Compañía. El texto, elaborado por la Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica, es pionero a nivel estatal e impide que se siga tratando como objetos a los animales de compañía.
La ley les reconoce como seres sensibles, establece el sacrificio cero y regula la tenencia responsable que hace referencia a las condiciones de vida digna del animal: atención, supervisión, cuidados, condiciones higiénico-sanitarias, espacios así como alimentación y bebida suficiente y conveniente para su desarrollo.
El nuevo marco legislativo, que inicia su trámite parlamentario en les Corts prevé la creación de un registro de personas y entidades inhabilitadas judicialmente por maltrato a los animales para evitar que personas o asociaciones penadas por mala praxis puedan volver a gestionar núcleos zoológicos. La creación de este mecanismo coincide con el planteamiento del Gobierno central de impedir que se puedan mantener malas prácticas con los animales mediante el traslado del núcleo zoológico de una autonomía a otra.
La ley prevé también la prohibición del uso de los animales como regalo, premio o reclamo publicitario. La educación agresiva, la atadura permanente y los espectáculos circenses con animales salvajes también estarán prohibidos. El texto da rango de ley a la prohibición de los circos con animales y a la tenencia de animales salvajes como animales de compañía.
La prevención del abandono y la esterilización son pilares del control poblacional que tienen un importante aliado en el refuerzo de la educación y la concienciación social para garantizar un trato digno de los animales de compañía.
El nuevo marco legislativo integral se articula en torno al refuerzo de la acción de las administraciones en la tutela de los derechos de los animales de compañía, las obligaciones de las personas responsables para garantizar el cumplimiento de esos derechos y en la concienciación social a través de la formación y educación en favor de una conducta cívica y compasiva.
Otra novedad importante es el reconocimiento de las casas de acogida que supone un reconocimiento más flexible y adaptado a los tiempos frente a los Núcleos Zoológicos de los Animales de Compañía.
El régimen sancionador endurece las multas que pueden ascender hasta los 45.000 euros y que tendrán un carácter finalista: deben destinarse a actuaciones de protección de los animales.
El proyecto de ley, que sustituye a la Ley 4/1994 del 8 de julio, brinda amparo legal a prácticas dentro del ámbito municipal como la creación de fórmulas públicas de adopción o la regulación del número de animales de compañía por vivienda con la suficiente flexibilidad y proporcionalidad.
A CONTINUACIÓN, NOTICIA DEL PASADO MES DE OCTUBRE DE 2020 (Los municipios valencianos podrán cobrar una tasa por tener mascotas):
- El pleno del Consell de la Generalitat Valenciana aprobó el pasado viernes 16 de octubre de 2020 el anteproyecto de Ley de Protección, Bienestar y Tenencia de Animales de Compañía, una norma que sirve para actualizar la Ley de 1994 y pretende erradicar los abandonos, impedir el maltrato, introducir restricciones (cada vivienda podrá tener como máximo cinco mascotas, por ejemplo) o, incluso, la opción de implantar una tasa municipal por tener un gato o un perro.
- En la nueva Ley, además, estarán prohibidos los animales exhibidos en escaparates” (estará prohibido exhibirlos en escaparates comerciales en la vía pública o en locales de ocio o diversión, así como donarlos como premio, reclamo publicitario, recompensa o regalo de compensación por otras adquisiciones distintas a la venta de animales). De la misma manera, queda expresamente vetada la utilización de animales de compañía en espectáculos, peleas, fiestas populares «y otras actividades que impliquen crueldad o maltrato, puedan ocasionarles la muerte, sufrimientos o hacerles objeto de tratamientos antinaturales o vejatorios», con la excepción de los festejos taurinos, una prohibición que comprende, además, desde atracciones feriales giratorias con animales vivos atados de tipo carrusel a las peleas de gallos o perros, pasando por los circos con animales pertenecientes a la fauna salvaje. Sigue leyendo aquí el artículo de Marta Gozalbo en Valencia Plaza, donde aporta todo lo que tendrá la nueva Ley.
- La nueva norma, una de las más avanzadas a nivel estatal, reconoce el carácter sintiente de los seres no humanos. El anteproyecto introduce novedades como el carácter finalista de la recaudación sancionadora y la formación obligatoria.
El Pleno del Consell ha aprobado el anteproyecto de Ley de Protección, Bienestar y Tenencia de Animales de Compañía, un nuevo texto legislativo desarrollado por la Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica que establece el sacrificio cero y fija entre sus objetivos la erradicación del abandono y el maltrato.
Este anteproyecto, uno de los más avanzados a escala estatal, reconoce el carácter sintiente de los seres no humanos y sustituye el carácter posesivo vinculado a los términos amo o dueño, por el de persona responsable.
El nuevo marco legislativo integral se articula en torno al refuerzo de la acción de las administraciones en la tutela de los derechos de los animales de compañía, las obligaciones de las personas responsables para garantizar el cumplimiento de esos derechos y en la concienciación social a través de la formación y educación en favor de una conducta cívica y compasiva.
En este sentido, destaca la formación obligatoria de todas aquellas personas que se relacionen con animales de compañía en el ejercicio de su trabajo y el enfoque holístico del concepto «tenencia responsable» que introduce un completo articulado sobre las condiciones de vida del animal relativas a la atención, supervisión, cuidados, condiciones higiénico-sanitarias, espacio o alimentación y bebida conveniente para su desarrollo, entre otras.
La protección de los animales que persigue la ley incorpora un amplio marco regulatorio que prohíbe la exhibición de los animales en escaparates comerciales y locales de ocio, la donación de animales de compañía como premio o reclamo publicitario, la educación agresiva, la atadura permanente o los espectáculos circenses con animales salvajes; una práctica, esta última, que ya eliminó la ley de medidas fiscales de 27 de diciembre de 2018.
Toda esta serie de modificaciones sirven para actualizar la Ley de 1994 y garantizar el bienestar animal. En cuanto a las sanciones, de hasta 45.000 euros, tendrán un carácter finalista destinándose a actuaciones de protección de los animales.
Asimismo, el anteproyecto brinda amparo legal a prácticas dentro del ámbito municipal como la regulación del número de animales de compañía por vivienda con la suficiente flexibilidad y proporcionalidad, o la aplicación de una tasa asociada a la cría y la tenencia para sufragar los gastos derivados de la Ley. El encaje legal se extiende también al reconocimiento de las casas de acogida.
En palabras recogidas en un artículo de Valencia Plaza, la imposición de un gravamen municipal prevista en la ley valenciana contrasta con la solución que adoptó la Comunidad de Madrid en 2016 o con la normativa que regula la misma materia en Cataluña. En ambos casos, se preveían líneas de ayuda con cargo al presupuesto autonómico en apoyo a los entes locales.
En el caso de la Generalitat, sin embargo, el Consell opta por dejar en manos de los ayuntamientos la potestad de imponer una nueva tasa para que sean los vecinos los que financien, vía impuestos, el incremento de costes previstos con la entrada en vigor de la nueva ley valenciana de bienestar animal. En este sentido, la consellera de Agricultura y Desarrollo Rural, Mireia Mollà, vaticinó en la rueda de prensa que la ley contempla la posibilidad de que los ayuntamientos apliquen una tasa a sus vecinos por tener mascotas «pero casi ninguno lo desarrollará». Ya el Ayuntamiento de Valencia se pronunció en 2019 al decir que no implantaría (de momento) una tasa. En cualquier caso, lo que es cierto es que la norma abre la puerta a que ocurra.