El pasado miércoles 6 de octubre de 2021 se presentó el proyecto de rehabilitación de las dos barracas ubicadas en la Escuela de Capataces Agrícolas del puerto de Catarroja -justo al lado de las coordenadas sexagesimales 39°23’37.7″N 0°22’48.3″W o en decimales 39.393792, -0.380087-, que se convertirán en el futuro museo etnológico de la Albufera.
Esta escuela, ubicada en el puerto de la albufera de Catarroja, a tres kilómetros del casco urbano en el Camí del Port s/n de Catarroja, es un instituto de formación profesional agraria perteneciente a la Diputación de Valencia, donde las barracas dependen del Museu Valencià d’Etnologia.
Fue el diputado de Cultura de la Diputació de Valencia, Xavier Rius, acompañado por el director del Museu Valencià de Etnologia, ETNO, Francesc Tamarit, quien se reunió con el alcalde de Catarroja, Jesús Monzó, y la concejala de Cultura, Dolors Gimeno, para presentar la rehabilitación del futuro museo.
El proyecto, que cuenta con una inversión total de 126.000 euros, incluye también la puesta en valor del entorno con la cebera, el horno moruno y una barca albuferenca.
Desde 2016, las dos barracas se convirtieron en «museo» del municipio pero sin llegar a concluir el proyecto de musealización, donde tan solo se realizó mejora y recuperación de las construcciones y su entorno –se realizó la conversión de las dos barracas tradicionales de la Escola de Capatassos para museo-. Por entonces, en la remodelación de las barracas se facilitaron utensilios clásicos de la época, tales como el horno moruno, la barca albuferenca o la cebera. Así lo atestigua una de las barracas, que lleva una placa indicando «Museu de les Barraques de Catarroja». Ahora, con el proyecto presentado en octubre de 2021, se le devolverá la vida a unas barracas que llevan esperando desde 2016 un proyecto de musealización digno.
Las obras de remodelación y adaptación de las barracas con una reformulación y recreación del hábitat tradicional incluirán también la restauración de la cebera, el horno moruno y una barca albuferenca, además de una línea museográfica que alcanzará el criterio de sostenibilidad como una forma de vida tradicional y que la sociedad de consumo ha hecho que abandonemos, según explicó el director del ETNO, Francesc Tamarit.
El proyecto del museo de las Barracas, gestionado por el área de Cultura y l’ETNO, llevará también una propuesta de colaboración con las localidades ribereñas y la construcción de itinerarios turísticos, culturales, medioambientales y educativos.
La exposición permanente de las Barracas del futuro museo, con museografía por bloques temáticos, mostrará además las problemáticas del lago, así como la vinculación agrícola y pesquera del entorno.
El proyecto, que ya está licitado, tiene un presupuesto de ejecución de 126.000 euros, y todas las previsiones apuntan que a principios de 2023 el museo podrá abrir las puertas con una museografía basada en la sostenibilidad, la economía circular y el autoconsumo, resaltando las vertientes agrícolas, pesqueras, de la vivienda y de las costumbres y tradiciones arraigadas en el lago.
Desde 2019, fecha de la realización de la fotografía que adjuntamos, hemos intentado visitar las barracas sin éxito. Este medio nunca ha podido verlas de cerca por diferentes motivos: desde la Escuela se nos explicaba que dentro no había nada, que no valía la pena; otra contestación, en otro tiempo, fue que no se podían visitar; otra excusa fue, en su momento, el tema del COVID-19; y así sucesivamente.
La primera rehabilitación de las barracas tuvo lugar en los años 70 del s. XX, donde el 11 de marzo de 1976, el presidente de la Diputación de Valencia, Ignacio Carrau Leonarte, y el entonces alcalde de Catarroja Joaquín Pedro Vila, inauguraron las barracas, algo que atestigua una de las placas que hay en una barraca. Años antes, en concreto 20, en 1956 se realizó el primer curso en la Escuela de Capataces Agrícolas de Catarroja, un curso que fue dirigido para veinticinco alumnos y dirección de ingenieros y técnicos especializados. El edificio especial de la Escuela es obra de la Federación Sindical de Agricultores Arroceros, y fue inaugurado, por entonces, en la última visita que el Jefe del Estado realizó a Valencia.