Situado a un kilómetro al oeste del casco urbano, junto a las coordenadas sexagesimales 39°37’26.8″N 0°19’21.8″W o en decimales 39.624111, -0.322715, el Molí de Vent de Puçol es la construcción más antigua que se conserva en Puçol, ya que algunos estudiosos la sitúan en torno al siglo X -esto sería porque seguramente sería aprovechada su estructura islámica posteriormente-.
Por desgracia, en nuestra visita de febrero de 2022 comprobamos su estado de abandono con vegetación, basura en su interior o con la puerta abierta.
El Molí de Vent de #Puçol, la construcció més antiga de la població, necessita actuacions per garantir la seua conservació. Fa dies hem comprovat el seu estat (porta oberta, vegetació al voltant, fem al interior, etc). @PspvPuzol @podempucol @AmoragaCarmen @PoblesValAbando pic.twitter.com/YscGAFMiAl
— Valencia Bonita ® (@valenciabonita_) February 16, 2022
Tal y como vemos en la web del Ayuntamiento de Puçol, en https://www.puçol.es/, «es, en cualquier caso, uno de los pocos molinos de estas características que sigue en pie en la Comunidad Valenciana.
Pero su integridad se ha visto amenazada en numerosas ocasiones. Tras dejar de funcionar a mediados del siglo XIX, su abandono paulatino hizo que fuera presa de las aves (para anidar), de los jóvenes (para jugar) y, en los últimos años, de los inmigrantes (que lo han utilizado como alojamiento de forma puntual). También la construcción del by-pass estuvo a punto de acabar con la montaña donde se encuentra situado; finalmente, las gestiones realizadas por el Ayuntamiento de Puçol permitieron realizar un desvío de la A-7 y hoy continúa su silueta destacando en un promontorio que separa la autopista del polideportivo municipal.
Pero las intervenciones para asegurar su continuidad no podían esperar más. Mientras se debate a nivel municipal si se convierte la zona en un museo o se acomete una restauración global, los técnicos de urbanismo ya dieron los primeros pasos aprovechando una subvención de 18.000 euros de la Diputación Provincial.
»Realmente acometer una restauración global es algo que está valorado en 90.000 euros» -informa el arquitecto técnico, Toni Sesé-. »Con la subvención obtenida lo único que se ha hecho es la consolidación de todos los muros, proteger la coronación, cubrir el techo y colocar rejas en las ventanas y puerta».
Esta primera fase de la restauración, a finales de 2018, corrió a cargo de Estudio (Métodos de la Restauración), una empresa ubicada en Castellón con amplia experiencia en este tipo de obras. Prácticamente todas las medidas fueron encaminadas a cimentar los muros, ya que las plantas silvestres que crecen a su alrededor deterioran su solidez, al tiempo que se intenta evitar la presencia de intrusos en el molino: toldos y rejas para evitar el acceso de palomas por el techo y ventanas superiores, mientras que las rejas y los candados de seguridad van destinados a impedir la entrada de personas en la parte baja.
En cualquier caso, esta fue una primera fase con la que se pretendía »garantizar que no se deteriore más, ya que en años anteriores han encendido incluso hogueras en su interior, pero no es más que el inicio de una actuación que debe continuar en años posteriores con la reconstrucción del techo y la habilitación de las dependencias» -concluía el arquitecto técnico-«.


Por muchas voces está considerada como torre defensiva o de vigilancia, siendo construida en torno al XVI para defenderse con la finalidad de las incursiones de piratas berberiscos –en la parte alta de la «torre-almenara», se encendía fuego si se avistaba un ataque inminente de berberiscos para advertir a la población-.
Sin embargo, la realidad es bien distinta. En la web oficial de Puçol se hace referencia a que se trata de uno de los pocos molinos de estructura árabe que existe en la Comunitat Valenciana con estas características.
Además, gracias al Club de Historia de Puçol, quienes participaron en el estudio para demostrar que el de Puçol es un molino de viento, sabemos su similitud con los ubicados en Xàbia.
SOBRE EL MOLINO DE VIENTO DE PUÇOL, SEGÚN LA FICHA DEL INVENTARIO GENERAL DEL PATRIMONIO CULTURAL VALENCIANO:
Este molino se sitúa en el poniente del núcleo urbano de Puçol, en lo alto de un suave alterón correspondiente a los contrafuertes meridionales del Picaio-Serra Calderona, a cuyos pies se esparce una fértil llanura agrícola.
El alterón donde se asienta el molino corresponde a una zona de secano, con algarrobos y escasa vegetación natural. La llanura que la rodea, sin embargo, corresponde a un área intensamente explotada agrícolamente gracias al regadío. Se observan algunos bancales con márgenes de piedra en seco así como una granja-corral situada al este del molino.
El molino se sitúa a orillas del antiguo camino de Llíria, a estas alturas de uso casi exclusivamente rural. Recientemente ha sido construido en la orilla ponentina del edificio el «cinturón de ronda de Valencia» que corta el alterón del molino.
Corresponde a una estructura aislada, cilíndrica, ligeramente más ancha que alta, que se asienta sobre la roca natural. Describiendo un pequeño cinto de obra de mampostería en la base.
Está construido con bloques de piedra trabados con mortero que configuran un grueso muro de 155 cm. Presenta una única puerta orientada al sudeste (120º), con las jambadas y el dintel de blandas, ahora casi totalmente desmontadas. El dintel es de arco rebajado, con «clavo» de tobes horizontales.
En la planta baja la escalera, de planta semicircular y andamio con adobes, ha desaparecido casi totalmente (sólo se conserva la parte superior). La bóveda, hecha con adobes, se conserva casi íntegramente, con un agujero cuadrangular situado en el extremo noroeste (aprox.) correspondiente al harinero.
Por debajo de la bóveda y sobre la pared, se observan dos agujeros, con sus correspondientes opuestos, que corresponderían a las marcas de la vivienda de una camarera ahora desaparecida.
En la planta baja existen dos ventanas, una al nivel del primer piso y otra más pequeña que airearía la «cambreta». En el piso superior se observan dos ventanas, una sobre la puerta y otra opuesta a la anterior.
Los materiales de construcción fueron bloques de piedra arenisca, careados o no, del mismo sitio o zonas cercanas. Mortero de cal. Blandas rectangulares.
La técnica constructiva se basa en la pared común con hiladas de piedras dispuestas horizontalmente y trabadas con mortero, que fue obrado mediante un andamio del que se conservan los agujeros cuadrangulares en el paramento exterior del muro.
Parte de este artículo es una obra derivada de la disposición relativa al proceso de declaración o incoación de un Bien de Relevancia Local según la Disposición Adicional Quinta de la Ley 5/2007, de 9 de febrero, de la Generalitat, de modificación de la Ley 4/1998, de 11 de junio, del Patrimonio Cultural Valenciano (según R-I-51-0003882 publicado en el BOE de 09/08/72), texto que está libre de restricciones conocidas en virtud del derecho de autor de conformidad con lo dispuesto en el artículo 13 de la Ley de Propiedad Intelectual española.