A las afueras del pueblo de Montanejos, a un kilómetro de la localidad castellonense, se encuentra la pequeña pedanía rural de la Alquería de Montanejos (conocida también como simplemente “la Alquería”), el origen o núcleo fundacional de la población.
Este bello rincón digno de visita esconde un pequeño casco antiguo de origen árabe (donde todavía es posible ver el trazado irregular); la ermita de la Virgen de los Desamparados (cuyo origen es del siglo XVII); una pequeña huerta junto al paso del río Mijares, el cual ofrece un lugar para el baño conocido como la poza de la Alquería; y un restaurante, la Cervecería de l´Ermita, cuya especialidad es servir comidas y cenas con una carta en la que destacan sus arroces y carnes a la brasa, establecimiento que cuenta con terraza que hace las delicias en las noches de verano con un ambiente chillout.
De la pedanía de la Alquería de Montanejos destaca su ermita de la Virgen de los Desamparados (cuya imagen preside el altar, con San José y la Inmaculada Concepción en los laterales). Este pequeño pero bello templo con campanario y pórtico es del siglo XVII, si bien en el siglo XVIII sufrió una remodelación que le aportó la imagen actual.
https://www.montanejos.es/es/patrimonio-historico/la-ermita
Ligado a este templo se encuentra la festividad de la Virgen de los Desamparados, que tiene lugar el segundo domingo de mayo. Sin embargo, en la pedanía de la Alquería de Montanejos, al igual que ocurre en muchas poblaciones de la Comunitat Valencia, se celebra en las fiestas de agosto (en la segunda quincena, siendo el día 15 el más grande) con misa solemne y procesión de la patrona.
En nuestra visita a la Alquería paseamos por las calles del barrio que dio origen a Montanejos (las cuales todas tienen curiosamente el mismo nombre, calle de los Desamparados) y, además, nos acercarnos al lecho del río Mijares para conocer la poza de la Alquería, rincón perfecto para el baño cuando aprieta el calor.



Todavía es posible ver parte del entramado morisco de las acequias. Destacar que el cercano puente de San José, edificado edificado en 1803 sobre el río Montán, dispone en su interior una pequeña acequia que lleva agua de riego hasta la Alqueria, de ahí su denominación de puente-acueducto.
Para rematar la visita a esta bella pedanía, pudimos probar el menú “Castelló Ruta de Sabor” que ofrece la Cervecería de l´Ermita, una degustación de productos de proximidad de la provincia de Castellón compuesta por espárragos con crujiente de jamón flor de Embutidos Flor y salsa romescu; una croqueta de rabo de toro Benages; humus de garrafón con aceite de oliva AOVE d57; rulos de berenjena con cuscús y miel de la Alquería de Montanejos; bacalao con allioli negro de Gil; solomillo con sobrasada San Vicente de Embutidos San Vicente; y de postre naranja con miel de la Alquería de Montanejos.
En nuestra publicación de Instagram podéis ver una serie de fotos y vídeos de la visita que hicimos a la Alquería de Montanejos. En el álbum de La Alquería de Montanejos (abril 2023) | Flickr podéis ver todas las imágenes de la pequeña pedanía.
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SOBRE EL ORIGEN DE LA ALQUERÍA DE MONTANEJOS:
Tal y como bien indica Joan Carles Membrado Tena en http://paisajesturisticosvalencianos.com/paisajes/montanejos/, el origen de Montanejos se remonta a la época musulmana, cuando se creó la alquería de Muntan as-sufla, ‘Montán de abajo’. Sus moradores se rebelaron contra Abú Zayd cuando este se convirtió al cristianismo en 1236. Pere Ximénez de Vallterra, también llamado Ximén de Vallterra, redujo a los sublevados y el rey Jaume I, en recompensa, le otorgó el señorío de Castell Montant, que incluía Montán, Montanejos y Arañuel.
Es en ese momento de la historia, anterior a Jaume I y a su llegada, cuando Montanejos, en realidad, se reducía al núcleo del caserío de la Alquería, lo que hoy se conoce como la Alquería de Montanejos, y el propio Castillo de la Alquería, fortaleza que hoy día se conoce como “Castillo de Montanejos” y a la que se accede realizando una ruta desde el puente de San José.
Según se puede leer en la ficha de protección patrimonial del castillo (un Bien de Interés Cultural incluido en el inventario general del Patrimonio Cultural Valenciano de la Conselleria de Educación, Cultura y Deporte de la Generalitat Valenciana), la alquería árabe de Montanejos pertenecía a los dominios de Castellmontán, dado por Jaime I a Ximén de Vallterra, familia a la que perteneció el señorío hasta el s. XIX. Este señorío incluía el vecino pueblo de Arañuel y el cercano núcleo de la alquería, donde se encuentra el ya mencionado castillo. Es en el siglo XVI, época en la que tuvo un gran desarrollo el cultivo del lino, cuando Montanejos comienza a constituir un núcleo compacto de población, el actual pueblo. Tras la expulsión de los moriscos en 1609, tiene lugar la repoblación con cristianos (carta puebla de 1612) y la erección de Montanejos como municipio independiente de Montán.
La huella de la cultura islámica ha quedado fosilizada en las huertas y sus sistemas de riego, así como en el urbanismo de Montanejos y sobre todo de la Alquería, barrio original de la localidad sobre el que se localiza el Castillo, auténtico balcón y mirador sobre el río Mijares. Esto es resultado de la prolongada presencia de la cultura islámica, cuyos habitantes fueron expulsados de forma definitiva en 1609.