- La capital cultural valenciana del 2018-2019, Potries (Valencia), ofrece un precioso museo etnológico de alfarería y varias rutas como la del agua, la ecoturística, la urbana y también una cicloruta.
Potries es un tranquilo pueblo de la comarca de la Safor, Valencia, a caballo entre el mar y la montaña, que siempre sorprende gratamente a sus visitantes. Es un destino idóneo para pasar el día y desconectar, sobre todo gracias a su patrimonio natural.
Sus museos y monumentos son también una buena opción para su visita. A través del Museo Etnológico Cassoleria d’Àngel Domínguez, ubicado en una casa de 200 años de antigüedad conocemos la historia alfarera de la localidad, en la que fue la casa-taller donde vivió y trabajó el último alfarero en activo de Potries. Ángel Domínguez, que da nombre al museo, fue el último eslabón de esta actividad milenaria en el municipio.
Por este motivo, el ayuntamiento decidió comprar la casa hace más de 30 años para conservar el testigo de la historia de la que deriva el nombre de Potries. No solo por la vivienda donde habitó la familia Domínguez, sino también por el taller donde se trabajaban las piezas, las balsas de elaboración del barro y el horno moruno para la cocción que encontramos en el patio.
En la planta superior, donde antiguamente se barnizaban las piezas, encontramos una colección de piezas creadas en las nueve cassoleries que hubo en Potries y un repaso por los 5.000 años de actividad alfarera en Potries con elementos arqueológicos del neolítico, época romana y medieval hasta la actualidad.

Para que Potries se convirtiera en un pueblo alfarero existieron tres factores fundamentales: la cercanía de canteras de arcilla, la proximidad de montes de donde recolectaban la leña y la abundancia de agua del río Serpis. Este último factor también es protagonista en Potries, con la ruta del agua.
La ruta del agua de Potries supone una bella propuesta señalizada por caminos y sendas rurales para conocer la importancia del agua en la población. Todos los elementos, y edificaciones hidráulicas significativas de la ruta, están debidamente señalizados y explicados con paneles.
El municipio cuenta con dos partidores de agua con más de 500 años de antigüedad; la Casa Clara y la Casa Fosca. Surgieron a raíz del “Tratado de la Concordia” que pretendía acabar con las guerras a causa del uso del agua y así crear unas fortificaciones para que el agua se dividiese equitativamente según la cantidad de tierra que hubiese que abastecer y que de esta forma nadie pudiese manipular su cauce.

Esta ruta empieza en el Ayuntamiento de Potries, una casa palacio del 1600, donde se conserva la “Puerta de los 5 cerrojos”, procedente del azud. El recorrido sigue por un antiguo pozo, un lavadero público y entre otros, la visita a dichos partidores de agua (ver PDF o ver de manera más detallada en recorrido ruta del agua punto a punto). Esta ruta se puede realizar guiada gracias a un guía de turismo de la población, siempre bajo reserva en http://potries.org/.
Uno de los elementos más significativos de la ruta del agua son los partidores, edificaciones hidráulicas construidas para dividir el agua, como la Casa Fosca (siglo XV) o la Casa Clara (siglo XVI), construcciones que garantizan la correcta división para que el agua llegue a todos los puntos de la huerta del municipio.
Existen otras rutas guiadas bajo reserva como la ruta urbana de Potries, para conocer su casco histórico y sus edificios más significativos, que podéis realizar de manera independiente y ver la ruta detallada en paso a paso ruta urbana de Potries; o los caminos de Sotaia, cuyo recorrido podéis ver en paso a paso Sotaia. También podéis aprovechar para hacer un recorrido por los árboles más singulares de Potries; o realizar una cicloruta.
Uno de los grandes reclamos de Potries, además, es la conocida Vía verde del Serpis, la cual pasa por el antiguo trazado del ferrocarril Alcoy-Gandía construido en 1892 a su paso por Potries.
