No, no es Egipto, y está aquí al lado, en la provincia de Valencia. Hablamos de las extrañas pirámides de El Perellonet, un conjunto de grandes bloques defensivos de hormigón, con forma de pirámide, que pueden parecer líneas defensivas de la Guerra Civil española.
Pues no, no son justamente eso, porque son mucho más cercanas a nosotros en el tiempo, de más reciente construcción, además de que su finalidad no fue bélica, sino que se colocaron en primera línea de playa y sirvieron, por entonces y ahora, para proteger la gola de la fuerza del mar.
Sin embargo, no siempre están visibles, y solo salen a flote, por así decirlo, tras grandes temporales en otoño e invierno, como por ejemplo tras los que hubo a principios de 2017, donde diversos medios de comunicación locales se hacían eco de las apariciones de estas construcciones defensivas en el mes de febrero.
La construcción de estos bloques de hormigón, en total 96, se remonta a la década de los 60 del pasado siglo, bloques que se colocaron tanto en la zona norte de la gola del Perellonet -donde también se incluía la reserva natural de La Punta- como en la zona sur, junto a la conocida playa del Recatí, zona ésta última que emergió y fue protagonista en prensa, y en la foto que adjuntamos que hicimos en su día y que hemos rescatado de nuestro móvil para adjuntar la historia de estas curiosas formaciones que miden más de dos metros de altura desde su base.
«La gola se construyó más o menos en 1895, pero cuando se canalizó la desembocadura, en los años 60 del pasado siglo, se instalaron estos grandes bloques de hormigón que tenían forma piramidal. La idea era que actuaran como una especie de escollera, una defensa. Con el paso del tiempo fueron soterrándose de arena hasta prácticamente desaparecer; por eso, que hayan salido de nuevo ahora, ha causado sorpresa entre algunos, aunque la gente del pueblo lo conoce de toda la vida».
Palabras de Luis Zorrilla, presidente de la Associació de Veïns de El Perellonet, en un artículo de febrero de 2017 a Levante EMV.
El mismo presidente ya explicó en su momento que la zona era de rápida regeneración, pero que si se llegaba al verano y se seguián viendo, en referencia también a los años venideros que salgan a flote tras un temporal, habrá un problema. Así mismo, Zorrilla, en declaraciones a la prensa, explicaba que las pirámides no siempre permanecieron soterradas, ya que fue en los últimos años, antes de 2017, cuando se aceleró su desaparición bajo la arena. Su explicación: el Ayuntamiento de Valencia utiliza en la actualidad máquinas para cribar y limpiar la arena. Al hacerla más fina, con el viento se desplaza más fácilmente y se crean «dunas artificiales alrededor de las pirámides». La acumulación de sedimentos durante largas temporadas acabó por sepultarlas.
No se trata un vestigio de civilizaciones remotas, ni de un modo de comunicarse con seres de otros planetas. En realidad forman parte de la escollera que se construyó en los años 60 para proteger el litoral del oleaje y que, con el paso de los años, habían quedado sepultadas bajo la arena.
Roberto Tortosa, la Valencia Insólita
Por último, decir que no fueron las únicas que se colocaron en primera línea. Marco L.M., nos comentaba en 2017 que también hubo otra línea en El Perelló, y que hubieron instaladas en las tres golas: en la del Puchol, la de El Perellonet y la de El Perelló, solo que las de este último desaparecieron con la construcción del club Náutico. Incluso en la localidad de Puçol hubo también pirámides.
Las pirámides junto al mar pueden aparecer, de nuevo, en el futuro, un fenómeno nada inquietante para los vecinos de este pueblo marinero pero que sorprende, y de qué manera por ser atracción turística, a visitantes esporádicos que se acercan a fotografiar los grandes bloque de hormigón en forma de pirámide.
