Valencia, sábado 30 de enero de 2021. El Ayuntamiento de Valencia espera la autorización de la Conselleria de Cultura para proceder al traslado del sarcófago del escritor Vicente Blasco Ibáñez al vestíbulo del Cementerio General, donde permanecerá definitivamente. El sarcófago, obra del escultor Mariano Benlliure, ha sido depositado en diversos lugares desde que, en 1935, el Ayuntamiento encargara al arquitecto Javier Goerlich y al escultor Benlliure un monumento funerario para el escritor, un proyecto que quedó inacabado por el estallido de la Guerra Civil.
Ante la imposibilidad de retomar la propuesta de mausoleo inicialmente planteada, el Ayuntamiento de Valencia, mediante las concejalías de Cementerios, Patrimonio y Recursos Culturales y de los Servicios Centrales Técnicos del consistorio, ha decidido la ubicación definitiva del sarcófago en el Cementerio General de la ciudad, lugar para el que fue concebido. El sarcófago permanecerá en el vestíbulo, un espacio ancho y digno que enaltece la obra de Benlliure y que permitirá su contemplación por todas las personas que visitan el lugar. Además, el vestíbulo garantiza su conservación por tratarse de un espacio cerrado a cubierto de las inclemencias meteorológicas. A su vez, el sarcófago de Blasco Ibáñez esculpido por Benlliure se convertirá en una señal de identidad de este museo del silencio.
El consistorio procederá al traslado cuando reciba la autorización pertinente de la Conselleria de Cultura de la Generalitat.
La concejala de Patrimonio y Recursos Culturales, Glòria Tello, ha afirmado que la decisión de traslado del sarcófago “se ha tomado en coordinación con la asociación y la Fundación de Vicente Blasco Ibáñez y, evidentemente como Ayuntamiento, rindiendo homenaje a este valenciano universal”. Tello ha destacado que “ubicamos el sarcófago que Benlliure hizo para él colocándolo en un lugar muy visible, como es el vestíbulo del Cementerio General”.
SOBRE EL SÁRCOFAGO:
Vicente Blasco Ibáñez murió en Menton, Francia, el 28 de enero de 1928. El Ayuntamiento encabezó el comité para el traslado de los restos del escritor, que llegaron al puerto de la ciudad en 1933, ya durante la IIª República. Ese mismo año, el consistorio encarga al arquitecto municipal Javier Goerlich la erección de un monumento funerario en el Cementerio General que incluiría un sarcófago diseñado por el escultor Mariano Benlliure. Las obras empezaron en 1935 pero quedaron inacabadas al inicio de la Guerra Civil. Desde entonces, el sarcófago esculpido por Benlliure ha estado depositado en el Convento de Carme y el Museo de Bellas Artes.
Este sarcófago jamás ha contenido los restos de Vicente Blasco Ibáñez, dado que nuestro protagonista está enterrado en el Cementerio General de Valencia, tras ser traslado a la ciudad en 1933 desde Francia tras su muerte en 1928.

El lugar donde está enterrado Blasco Ibáñez es el llamado cementerio civil, la Sección 4ª, un lugar que fue inaugurado en agosto de 1892 gracias a la aprobación de ley de libre pensamiento (y que su historia va en origen ligada al Protestante en cierta manera), un lugar donde además de encontrarse Blasco, el periodista Azzati, Amparo Meliá (esposa de Pablo Iglesias, fundador del PSOE) o Constantí Llombart, entre otros, podemos ver también todo tipo de simbología. Un lugar donde se inhumaron todo tipo de laicos, extranjeros o aquellos que simplemente no eran católicos y eran libres pensadores (incluidos musulmanes mirando hacia la Meca).
Sobre el sarcófago, entre algunas de las inscripciones que podréis leer en el sarcófago, encontraréis la dedicatoria de “Valencia a Vicente Blasco Ibáñez” o los títulos de las obras de Blasco.



EN ESTE 2021, SE MANTUVO LA OFRENDA FLORAL PERO SE SUSPENDIERON LOS ACTOS
Por otro lado, la Concejalía de Patrimonio y Recursos Culturales ha suspendido este año el acto de homenaje a Blasco Ibáñez que tradicionalmente se celebra en el Cementerio General cada 28 de enero, aniversario de la muerte del escritor. Este año ha sido una decisión consensuada con las asociaciones blasquistas que se toma por la situación de pandemia que vivimos y para evitar nuevos contagios.
Sin embargo, el Ayuntamiento ha mantenido el recordatorio del escritor con la colocación de la tradicional corona de flores en su tumba en el Cementerio General de la ciudad.
