Valencia, martes 24 de agosto de 2021. El Ayuntamiento de Valencia está llevando a cabo visitas nocturnas guiadas y completamente gratuitas en el refugio de la Guerra Civil de Massarrojos, tal como ha explicado este lunes la concejala de Patrimonio y Recursos Culturales, Glòria Tello. Según ha subrayado la concejala, «se trata de una manera diferente y muy especial de visitar estos espacios, que son historia viva de nuestra ciudad y que habían sido ocultados desde el régimen franquista hasta nuestros días».
Las obras de rehabilitación del refugio antiaéreo de Massarrojos terminaron el pasado mes de diciembre, y desde enero de este año se puede visitar el conjunto. «Se trata del tercer refugio que se ha rehabilitado y se ha abierto a las visitas ciudadanas en Valencia, los tres durante el gobierno de Joan Ribó. Y es que consideramos que la memoria histórica es fundamental para recordar que Valencia fue una de las zonas de la España republicana que sufrió más bombardeos y los efectos que los bombardeos tuvieron contra la ciudad y contra la población civil», ha dicho Glòria Tello.
El Ayuntamiento organiza visitas guiadas todos los sábados y domingos de 18:00 a 20:00 horas y no es necesario reservar, simplemente acercarse a la entrada del refugio. Para las actividades nocturnas sí que es necesario realizar una reserva. Para informarse e inscribirse hay que enviar un correo electrónico a vlcmuseuseducatius2@valencia.es. La próxima visita nocturna especial está programada para el 28 de agosto.
El refugio, situado dentro del ámbito de protección del casco histórico primitivo de Massarrojos, fue construido en los últimos meses de la Guerra Civil, excavado directamente al subsuelo rocoso, como protección de los vecinos ante los ataques aéreos del bando rebelde. Las obras del refugio comienzan el 21 de mayo de 1938 y finalizan el 23 de marzo de 1939, según consta en el archivo municipal. Con el final de la guerra, el refugio quedó inacabado, oculto en el subsuelo e incluso se tapiaron los accesos.
A diferencia del resto de refugios de la ciudad, que están construidos con hormigón armado, el de Massarrojos está excavado directamente en el suelo geológico aprovechando el sustrato de roca. Dispone de un pasillo alargado de 125 metros de largo, 2 metros de ancho y una profundidad media de 10 metros. Tiene dos accesos a la plaza del Soñador y en la calle Benet Bosch. Las paredes tienen un color rojizo por el uso de arena y llevan adosado un banco corrido. El refugio tiene una superficie útil de 297’31 metros cuadrados y capacidad para 230 personas sentadas. Es el único refugio que se conserva en un pueblo de Valencia ciudad.
El pueblo de Massarrojos, que en la década de los años treinta tenía unos 700 habitantes, corría al refugio cuando escuchaba las campanas, que repicaban con un toque fuerte para avisar de los ataques. Al acabar la Guerra Civil, hubo un mantenimiento del refugio hasta el final de la Segunda Guerra Mundial pensando en una posible invasión aliada y, posteriormente, se utilizó como plantación de champiñones hasta que fue tapiado.
CARACTERÍSTICAS DEL REFUGIO:
El refugio, situado dentro del ámbito de protección del núcleo histórico primitivo de Massarrojos, fue construido en los últimos meses de la Guerra Civil, excavado directamente en el subsuelo rocoso, como protección de los vecinos ante los ataques aéreos del bando rebelde. Las obras del refugio empiezan el 21 de mayo de 1938 y finalizan el 23 de marzo de 1939, según consta en el archivo municipal. Con el final de la guerra, el refugio quedó inacabado, oculto en el subsuelo e incluso se tapiaron los accesos.
A diferencia del resto de refugios de la ciudad, que están construidos con hormigón armado, el de Massarrojos está excavado directamente en el suelo geológico aprovechando el sustrato de roca. Dispone de un pasillo alargado de 125 metros de largo, 2 metros de ancho y una profundidad media de 10 metros. Tiene dos accesos en la plaza del Soñador y en la calle Benet Bosch. Las paredes están lucidas de un color rojizo por el uso de arena y llevan adosado un banco corrido. El refugio tiene una superficie útil de 297’31 metros cuadrados y capacidad para 230 personas sentadas. Es el único refugio que se conserva en un pueblo de València ciudad.
Las obras de rehabilitación han tenido un coste de 205.625 euros y han consistido en la instalación de alumbrado y ventilación en la sala subterránea, reposición de los derrumbes, restauración de bancos, tratamiento de paredes y suelo y la construcción de dos accesos en recodo desde la vía pública con escaleras cubiertas por bóveda acabada en ladrillo.
La concejala de Patrimonio y Recursos Culturales, Glòria Tello, ha afirmado que se ha hecho “una actuación rehabilitadora respetuosa con el patrimonio y la Historia”. Tello ha recordado que se tenía constancia de la existencia del refugio “pero no se sabía dónde estaba la entrada hasta que, durante las fiestas de 2016, en unas obras para la instalación de una valla, se descubrió casualmente”. En este aspecto, Tello ha dicho que “el Ayuntamiento estaba haciendo en ese momento la rehabilitación de los refugios de Serranos y de la casa consistorial y pensamos que Massarrojos también tenía que entrar”.
Las obras acabaron el 30 de septiembre y han sufrido retrasos a causa de los parones de actividad motivados por el estado de alarma de la covid-19. El refugio de Massarrojos es el tercero de titularidad municipal que se rehabilita en la ciudad de València después del situado en la misma casa consistorial y el de la calle de Serranos.