- Las hijas del difunto gran artista de Benicalap, Gori Muñoz, han creado una página web, gorimunoz.com, dedicada a rendir homenaje al gran artista y creador valenciano, olvidado en su tierra natal –la ciudad de Valencia-, donde ni tan siquiera tiene una calle.
- La entidad sin ánimo de lucro ACR Constantí Llombart nos comenta que es sorprendente que en países como Argentina -donde tiene una calle dedicada y una placa en el edificio donde vivió en Buenos Aires- el escenógrafo y pintor valenciano Gori Muñoz obtenga el respeto y el reconocimiento oficial que se merece, mientras en su tierra natal, la ciudad de Valencia, es ignorado y despreciado, a pesar de las constantes peticiones de un merecido homenaje.
- Pinchando en las siguientes secciones (CINE; TEATRO; TOROS; ILUSTRACIONES; o ESCRITOS, podrás ver la gran extensa obra y legado de Gori Muñoz).
- También podéis leer el artículo Gori Muñoz i Montoro, artista, escenógrafo, dibujante, diseñador… natural de Benicalap. de la web de agendacomunistavalencia.blogspot.com para conocer más sobre su vida.
Dicen que nadie es profeta en su tierra. Muchos incluso post mortem -por desgracia-. Es el caso del Gregorio Muñoz Montoro (Benicalap,1906 – Buenos Aires, 1978), más conocido como Gori Muñoz, gran persona que fue artista, escenógrafo, dibujante, diseñador y, entre otras cosas, impulsor de la decoración de la Estación del Norte, el Museo de Cerámica González Martí u otros edificios singulares del barrio de Ruzafa, en la ciudad de Valencia.

La web gorimunoz.com, dedicada a su memoria, reúne una pequeña biografía llena de recuerdos y fotos gracias a sus hijas Carmen (Gorita) Muñoz-Bernand y María Antonia (Tonica) Muñoz-Malajovich. La página cuenta, también, con la colaboración de Rosa Peralta Gilabert, autora de varios artículos y un valioso texto sobre su vida y obra.
El texto biográfico dice así: «Gori Muñoz fue un artista plástico español que se destacó desde muy joven por sus colaboraciones como ilustrador, dibujante y caricaturista en varios diarios y revistas. Vinculado a las vanguardias de su época, formó parte del círculo de Josep Renau, con quien trabajó en la Dirección General de Bellas Artes de Valencia y en el Pabellón de España de la Exposición Internacional de Paris (1937).
Durante la Guerra Civil Española (1936-1939) participó activamente en la Sección de Artes Plásticas de la Alianza de Intelectuales Antifascistas y en la Subsecretaría de Propaganda del Gobierno de la República. Al finalizar la guerra se refugió en Francia, desde donde partió rumbo a Chile, con su mujer María del Carmen García Antón y su primera hija, recién nacida. Se afincan en Buenos Aires, donde nace su segunda hija.
En la Argentina, Gori Muñoz desarrolló intensa actividad profesional. Como escenógrafo y director de arte es considerado un innovador del decorado cinematográfico y del cine argentino. Entre 1941 y 1973, participó en 192 películas, entre las cuales La Dama Duende, Dios se lo pague, Sangre Negra, Los Isleros, Las aguas bajan turbias, Rosaura a las diez, El hombre de la esquina rosada, etc… Por su trabajo recibió 30 premios de la Asociación de Cronistas, del Instituto de Cinematografía y de la Academia de Artes Cinematográficas de la Argentina.
También realizó los decorados y figurines de 162 montajes teatrales en Buenos Aires y Montevideo, incluyendo autores clásicos y modernos, comedias, dramas, espectáculos al aire libre, musicales etc.
Paralelamente a su trabajo de escenógrafo y director de arte, publicó artículos y libros, colaboró como ilustrador em diversas revistas y editoras y montó varias exposiciones de pintura.
Murió en 1978 sin haber regresado a España (matizar que había estado en España en 1958 visitando a su madre. Y que a partir de la muerte de Franco, regresó a España varias veces antes de morir). Pidió ser incinerado y que sus cenizas fueran arrojadas al río: «ellas solas sabrán encontrar el camino de Valencia». Así se hizo».
Otra de las mejores biografías para conocer su vida es la de Margarita Xirgu, web en la que se menciona, en un gran artículo, que «Gregorio (Gori) Muñoz Montoro, nació el 1906 en Benicalap (Valencia). Fue pintor, dibujante, caricaturista, diseñador y escenógrafo. Era natural del pequeño y recoleto poblado valenciano de Benicalap, por entonces en plena huerta, lleno de exuberantes jardines y huertos cuajados de flores, repleto de hermosas torres góticas y excepcionales alquerías medievales, con magníficos molinos, acequias y senderos cuidados con primor y altiva elegancia. Se inició en el campo artístico de la mano de su padre Gregorio Muñoz y Dueñas, que fue pintor y fundador de la Escuela de Cerámica de Manises…». SIGUE LEYENDO EN margaritaxirgu.es
Para saber más sobre la vida y obra del gran Gori Muñoz, leer:
- Memorias de un escenógrafo
- EL APORTE DE LOS INMIGRANTES AL CINE ARGENTINO: GORI MUÑOZ Y EL DESARROLLO DE LA ESCENOGRAFÍA COMO ELEMENTO DRAMÁTICO
- Gori Muñoz y la “Venadita” :Artistas, Republicanos y Socialistas.
- Gori Muñoz i Montoro, artista, escenógrafo, dibujante, diseñador… natural de Benicalap.
Según podemos saber gracias a don Antonio Marín Segovia, Gori Muñoz nació y vivió frente a la Ceramo de Benicalap, esa gran joya olvidada de la que llevan años diciendo que va a ser rescatada -y que, de momento, a fecha de abril de 2021, todo queda en palabras-.
Al igual que Luis Dubón Portoles (Valencia 1892 – 1953), o incluso Josep Renau, Gori Muñoz sigue siendo un gran olvidado en la ciudad de Valencia.
Se sabe, además, que la esposa de Gori, Carmen Antón, fue colaboradora de Federico García Lorca en La Barraca, siendo íntima de Luis Cernuda, Vicente Aleixandre… -según palabras de margaritaxirgu.es, Carmen Antón fue la última superviviente de «La Barraca», el famoso grupo teatral fundado por Federico García Lorca-.
Gori Muñoz llegó a ilustrar, por ejemplo, obras como los «Poemas Póstumos» de Federico García Lorca.
Dicho lo anterior ¿por qué no se ha realizado un homenaje en torno a Gori Muñoz y su esposa, personajes más conocidos y respetados en Argentina que en su propia tierra natal?
La entidad sin ánimo de lucro ACR Constantí Llombart nos comenta que es sorprendente que en países como Argentina, el escenógrafo y pintor valenciano Gori Muñoz obtenga el respeto y el reconocimiento oficial que se merece, mientras en su tierra natal, la ciudad de Valencia, es ignorado y despreciado, a pesar de las constantes peticiones de un merecido homenaje.
La citada asociación nos comenta que llevan años realizando dicha petición y que nadie, ni Joan Ribó ni la Generalitat Valenciana, ha dado un paso adelante para hacer realidad el homenaje. Quizá, algún día, el actual consistorio o el que tenga que venir mueva ficha para traer a España a las hijas de Gori, organizar una exposición “com Déu mana” y dedique una calle en Benicalap al hijo del que fue fundador de la Escuela de Cerámica de Manises y uno de los impulsores de la decoración de la Estación del Norte, el Museo de Cerámica González Martí y otros edificios singulares de Ruzafa. Ojalá ese día llegue pronto.
El Museo del Cine Pablo Dicrós Hicken de Buenos Aires le dedicó dos exposiciones bellísimas. Ojalá lleguemos a ver alguna en Valencia.

Director artístico. Desarrolló prácticamente toda su carrera en Argentina, país al que llegó tras su exilio de España al finalizar la Guerra Civil. Durante la república realizó trabajos de ilustración y decoración, colaborando con Josep Renau y Salvador Alarma (escenógrafo del Liceo de Barcelona).
Su trabajo de escenógrafo fue de vital importancia en la evolución del cine argentino, en el que introdujo diversas innovaciones técnicas, procedentes de su formación europea (había estado becado en Francia, Holanda y Bélgica), que modificaron a su vez la tradicional forma de iluminar de los operadores argentinos, y contribuyeron a mejorar la calidad del sonido. En todas sus películas está presente un acentuado sentido del espectáculo, y una gran riqueza de detalles, desconocidos hasta entonces en las producciones argentinas.
Tras su primera película, Canción de cuna (Gregorio Martínez Sierra, 1941), ha trabajado con todos los directores importantes del cine argentino: con Luis Saslavsky en La dama duende (1945), El abanico de Lady Windermere (1948), Las ratas(1962), etc.; con Luis César Amadori en Alma fuerte (1949), Nacha regules (1950),La de los ojos color del tiempo (1952), Amor prohibido (1958), etc.; con Leopoldo Torre Nilsson en En cuerpo y alma (1953) y El protegido (1956); con Lucas Demare, en Los isleros (1951), Detrás de un largo muro (1958), Hijos de hombre (1960).
Además de su actividad cinematográfica, desarrolló una amplia labor en el campo teatral.
Historia del cine valenciano – Levante EMV. Fuente: IVAC