La Cordá de Paterna, la cual se celebra el último domingo de agosto, conforma un acto de gran tradición y concurrencia popular, ya que atrae a miles de personas deseosas de presenciar un acontecimiento único en el mundo por su magnitud y espectacularidad.
Declarada Fiesta de Interés Turístico Nacional y Bien de Interés Cultural Inmaterial, se enmarca en la celebración de las Fiestas Mayores en honor al Santísimo Cristo de la Fe y San Vicente Ferrer.
Para este 2023 se celebra el domingo 27 de agosto en la calle Mayor desde las 01:30 horas de la madrugada del domingo al lunes, noche en la que se prevé el lanzamiento de unos 70.000 cohetes (1.000 kilos de material pirotécnico) en tan sólo 20 minutos.
Acabada la Cordà, dará continuación a la Gran Recordà y la Peça durante toda la noche desde las 03:00 horas en el Parque Central (Antiguo Tiro Pichón).
Por cierto, un día antes, el sábado 26 de agosto a las 23:00 horas, tendrá lugar un gran correfoc y, posteriormente, la Cordá en el Cohetódromo a las 02:00 horas de la madrugada.
Se celebra en la estrecha Calle Mayor, llena de cohetes y femelletas, de diferentes clases y modelos, en un tramo de 120 metros de largo por 8 de ancho comprendido entre la Plaza Mayor y la Calle de San Antonio. En cada cajón se sitúan tres personas (como norma general), una de las cuales es ya veterana y, según turno, es la encargada de extraer los cohetes de forma que se mantenga un ritmo constante de fuego. La participación se sitúa en torno a las ciento cincuenta personas o las que se inscriban (más de 300 en el último año), procedentes fundamentalmente de las Peñas y Vecinos.
La técnica desarrollada por tiradores y tiradoras, aprendida durante generaciones, resulta fundamental para conseguir un espectáculo con ritmo, en el que, por unos minutos, el hombre es capaza de mantener un equilibrio graduado y aprovechar su especial habilidad para dominar el fuego. Los tradicionales brazaletes de los tiradores cuentan con un chip que recoger información personal sobre el participante como nombres y apellidos y una foto identificativa. Además, los brazaletes llevan luces de diferentes colores para diferenciar a los distintos grupos de participantes. Hay tres colores identificativos: rojo, para los participantes; verde, para la Seguridad y azul para los policías que participan de la Cordà.
Por otro lado, durante la celebración de la Cordà, se refuerza la seguridad en el acceso a la Calle Mayor para evitar la entrada a personas no autorizadas. De esta manera se asegura que todos los participantes cumplan los requisitos previos para estar en la Cordà, como ser poseedor del título del curso CRE (Consumidor reconocido como experto), que desde hace años se celebra en Paterna y en el que se enseña las medidas de seguridad que se deben tener en cuenta a la hora de manejar material pirotécnico.
Durante todo el mes de agosto se realiza el montaje del enrejado y estructuras de protección para la celebración de la Cordà en la calle Mayor. Unas tareas que se llevan a cabo hasta el mismo día en que se celebrará el emblemático acto de fuego. Mediante una elevadora de tijera de 18 metros, los trabajadores pueden acceder a los balcones y las partes más elevadas de los edificios. Mencionar que se certifica la seguridad de los anclajes y la estabilidad de las protecciones a medida que avanza su instalación a lo largo de los 120 metros de calle.
Además de todo lo mencionado anteriormente, el Ayuntamiento de Paterna cuenta con un registro de incidencias de los daños, tantos físicos como materiales, que se produzcan como consecuencia de la Cordà que se celebra el último domingo de agosto.